En este domingo de Ramos
En el que se cumple la ley
La gente tiende sus ramos
Para esperar a su Rey.
Como en los días de gloria
Jesús anunciaba su pasión
Para no perder la memoria
De lo que fuera su misión.
Se entiende su señorío
En su muerte y resurrección
Pues de su estado sombrío
Resuenan celebración
En cada liturgia se ofrece
Todo el misterio pascual
Y todo Él permanece
En el vino y en el pan.