Siempre que leo “Camino”
(su edición tradicional)
hay un algo emocional
que de mi infancia devino
y por eso yo me inclino
por la tirada ya impresa
porque mi mente regresa
a aquellos días pasados
de los diarios editados
como una luz que no cesa.
Periódico “El Nacional”
(el mismito que hoy existe)
un tabloide que persiste
en forma convencional
veraz y profesional
lo mismo que el “Listín Diario”
mucho más que centenario
decano del periodismo
sirviendo con altruismo
como un medio extraordinario.
Tenemos “La Información”
del Cibao puntual aporte
que ha servido de soporte
además de formación
en la gran transformación
de tan vital ejercicio
volcados siempre al servicio
de la comunicación
sin esperar ovación,
ni lauros ni beneficio.
“El Caribe” no lo olvido
“Diario Libre”, “Nuevo Diario”
“Hoy” también legatario
de ese largo recorrido
que a la prensa ha enriquecido,
y un discreto peregrino
en lo social y divino
que lleva paz y esperanza
esa luz que nos alcanza
cuando leemos “Camino”.-