Una isla  compartimos 

dos países soberanos 

tan distantes cuan cercanos 

por la historia que vivimos

uno y otro construimos

nuestra propia identidad

contra toda adversidad 

con espíritu patricio, 

con sangre, con sacrificio

logramos la libertad.

En el mismo territorio

moldearon sus culturas

y sociales estructuras

de perfil contradictorio

con trazo demarcatorio

para las dos poblaciones

con opuestas tradiciones 

que prevalecen aún

pero con tanto en común 

como vecinas naciones. 

Sucesos particulares 

marcaron el crecimiento 

y el mismo distanciamiento

de estos pueblos insulares 

que enfrentaron nuestros lares

desde el colonialismo 

dejando un antagonismo

que nos midió varias veces

entre triunfos y reveses 

avances e inmovilismo.

Hoy miramos el balance

de todo lo acontecido

uno desfavorecido:

y otro con un claro avance;

pero, se gesta un percance 

contra nuestra dignidad

donde hay complicidad

de extraños y de traidores

que traman tras bastidores

ceder nuestra integridad.

Hemos sido generosos

solidarios, comprensivos …

y (en momentos) permisivos

con desleales y afrentosos 

que con planes ominosos

nos llevan al sacrificio 

buscando el tiempo propicio 

para darnos el zarpazo

y ya nos tienen a un paso

al borde del precipicio.-