No volverán

El sueño de la mayoría de los dominicanos que han emigrado a otros países es mejorar su condición de vida, para lograr volver al territorio que los vio nacer.

Para alcanzar este reto llevan una vida sacrificada en la nación que los acogió. Laboran en varios lugares, trabajan horas extras y se privan de muchos deseos para acortar los días del regreso a la patria de sus amores. Pero este anhelo se transforma en pesadilla cuando al regresar al país son víctimas de atracos en el tra­yecto de los aeropuertos hasta sus hogares. Cono­cemos casos recientes ocu­rridos en el Cibao en donde estos hermanos que vienen cargados de ilusiones, son despojados de sus pertenencias por delincuentes armados que han hecho de esta práctica, un modo de vida.

Las familias que han pasado por este trance tan peligroso y triste sienten la impotencia y la amargura de quedarse sin nada, después de planificar el viaje que pensaban sería feliz, porque se encontrarían con los seres queridos que ansiaban su llegada.

Estos hechos bochornosos alejan a nuestros visitantes. También desalientan a otras personas que pensaban volver a sus comunidades de origen para pasar los últimos años de su existencia, aquí. Hoy se están yendo a otros lugares de Estados Unidos, aunque sientan la nostalgia de no poder reencontrarse con su cultura, el cariño y la hospitalidad que nos caracteriza.

Hacemos un llamado a las autoridades para que se tomen todas las medidas necesarias y así evitar que estos actos vandálicos se repitan. Es necesario que haya más vigilancia en las rutas de los aeropuertos. Y que se aplique todo el peso de la ley a los responsables de estos hechos criminales