-José Soriano
La globalización es el proceso de interconexión entre diferentes países, personas, empresas y culturas de todo el mundo. Actualmente sigue teniendo una influencia significativa en la cultura y la identidad de las personas o sociedades alrededor del mundo, logrando una mayor interconexión entre las diferentes partes, lo cual ha influido en la perspectiva o la forma en la que cada individuo percibe y construye su identidad cultural.
Con la globalización se ha creado una cultura global homogeneizada impulsada por los medios de comunicación y los avances tecnológicos, en el que se intercambian formas culturales y valores, fomentando una pérdida de diversidad cultural por medio de nuevas formas de expresión e identidad cultural.
Actualmente, las culturas más dominantes, como la cultura occidental, a menudo influyen y se imponen en otras culturas. Esto puede llevar a la marginación y desplazamiento de las culturas locales, especialmente en comunidades más pequeñas o menos poderosas. También la globalización ha llevado a una creciente comercialización de la cultura. Las expresiones culturales a menudo se adaptan y modifican para satisfacer las demandas del mercado global, lo que puede resultar en una pérdida de autenticidad y significado cultural.
Es importante reconocer que la globalización no necesariamente implica una pérdida total de la cultura, y que también puede haber intercambios culturales enriquecedores. Sin embargo, es esencial valorar y preservar la diversidad cultural en un mundo globalizado. Esto implica promover la protección de las culturas locales, fomentar la educación y el respeto intercultural.