Aún se espera el resultado
del Censo de Población
para saber la nación
cómo anda nuestro Estado
con lo que fue reportado
desde la última vez
si es un éxito o un revés
(como algunos van diciendo)
y si mal se ha estado haciendo
revisarnos de una vez.
Fue con bombos y platillos
que se anunció la jornada
y que una hueste entrenada
peinaría como rastrillos
con cuestionarios sencillos
de nuestras características
teniendo las estadísticas
totales del territorio
en un plazo perentorio
rurales como urbanísticas.
Se lanzaron al terreno
miles de empadronadores
y también supervisores
que trabajaron sin freno
y ¡hasta con dinero ajeno!
en lo que hacían el pago
que se quedaba en amago
pues … ¡dinero no llegaba!
y el Censo no se acababa
tornando el proceso aciago
Dijeron primer trimestre
de este año que discurre
no sabemos lo que ocurre
pues no hay nadie que lo muestre
o si no que lo demuestre
la ONE el levantamiento
y con su conocimiento
saber si valió la pena
o merezca la condena
por no haber un planeamiento.-