Diócesis de San Juan de la Maguana realiza alegre peregrinación a Higüey

16
653

En un ambiente alegre y emotivo después de dos años de ausencia por motivo de la Pandemia del Covid 19, la Diócesis de San Juan de la Maguana, peregrinó al encuentro de nuestra amada Madre, la Virgen de la Altagracia. Dicha peregrinación se realizó el sábado 7 del mes en curso.

Cabe destacar que nuestra diócesis se caracteriza entre otras cosas por ser una diócesis con un alto sentido de la religiosidad popular y una gran devoción a Nuestra Señora de la Altagracia. Es por ello que cada año los fieles de esta Iglesia particular se disponen a ir a la Basílica de Higuey a dejar a los pies de la Madre todas sus inquietudes, necesidades, enfermedades y sobre todo una humilde y sincera veneración por haber sido testigos durante tantos años de la valiosa intercesión de La Llena de Gracia, en favor de su pueblo.

 A pesar de las circunstancias sociales, sanitarias y económicas que hemos tenido que afrontar en los últimos tiempos, la participación en dicha peregrinación fue muy significativa. La presencia de Monseñor Tomás Alejo Concepción y de los sacerdotes en compañía de los feligreses de sus respectivas parroquias es un elemento que debemos resaltar, ya puede ser el signo de una Iglesia que quiere caminar junta, avanzar hacia Cristo Buen Pastor en unidad y alegría, aun en medio de sus limitaciones humanas.

Aunque la Eucaristía tendría lugar a las 10:00 am, muchos de nosotros vimos salir el Sol en los hermosos entornos de verdes palmeras de nuestra Basílica, porque muchos peregrinos prefieren estar ahí desde muy temprano para poder saludar con calma a “Tatica” y disponerse posteriormente a participar de la Santa Misa.

En esta ocasión la Celebración Eucarística fue presidida por el obispo Anfitrión, Monseñor Jesús Castro Marte, Obispo de Nuestra Señora de la Altagracia, quien en su homilía subrayó que Dios siempre actúa con su gracia en nuestra humanidad como lo hizo en María, para llevar a cabo su obra, y de esta manera a actuado en la Diócesis de San Juan de la Maguana, la cual se ha preocupado también por las necesidades humanas de su gente. 

Sin embargo, en una actividad tan significativa para nuestra diócesis no podían faltar las efusivas palabras de nuestro Pastor, quien comenzó agradeciendo la generosidad de Monseñor Castro Marte por celebrar la divina liturgia y también resalto la presencia de nuestro Obispo Emérito Monseñor José Dolores Gullón.

Posteriormente añadió que «la Virgen María no nos dice nada de sí misma, sino que nos invita a la escucha de su Hijo». Así mismo Exhortó a los fieles que el pastorea a que no se fueran de la Basílica sin escuchar lo que la Virgen quería decirle a cada uno. Resalto además que, «aunque la Basílica es inmensamente grande y fuerte, el cuadro de la Virgen es muy pequeño, porque la grandeza de María está en la bondad y en la pequeñez, en dejar que ella solo sea vasija de Dios, pero ella no quiere ser Dios. Todos venimos aquí enamorados de la Virgen para que ella nos lleve a Jesús y nos muestre el corazón de su Hijo.  Y creo que cuando una persona conoce y ama a Jesús promueve su alma, promueve su corazón, su familia, la Iglesia, La Patria y toda la humanidad que es propiedad del Señor.

En el contexto de la Sinodalidad, invitó a escucharnos, para que todos nos sintamos hermanos y en el centro de la Iglesia esté Jesús.

Que nuestra Señora de la Altagracia siga acompañando nuestra amada Diócesis de San Juan de la Maguana en el caminar hacia la santidad a la que nos invita su Hijo.

16 COMENTARIOS