El reto de convivir

“Vive con los demás como si Dios te viera … que, ciertamente, te ve.”

-Lucio Anneo Séneca-

Expresamos con frecuencia

quejas ante los demás 

y hay que decir (además)

que no es vanilocuencia;

es natural consecuencia 

de un insulto o un maltrato 

que va dejando un sustrato 

en la diaria relación 

quedando en la población 

un sentimiento no grato.

Se dan estas situaciones

en el súper o en un banco

donde se puede ser blanco

en estas interacciones 

de molestosas  fricciones,

lo mismo que al transitar 

pues se pueden suscitar 

algunos inconvenientes 

cuando somos  impacientes 

y actuamos sin meditar.

Las relaciones humanas 

siempre tienen sus aristas

y hay que ser equilibristas

para conservarlas sanas

respetuosas y llanas

en un mundo tan complejo

donde fruncir entrecejo 

puede a otros molestar

provocando un malestar

y ofender a perencejo.

Apreciemos nuestro entorno

y  con quienes convivimos

pues de todos recibimos

(lo que damos) en retorno

no seamos un trastorno 

en el diario discurrir

y lo que pueda ocurrir

siempre obra para bien

cuando evitamos también 

en un mal paso incurrir.-