TABLA DE CONTENIDOS……………………………………………………………………………
INTRODUCCION………………………………………………………………………………………………………..
OBRAS ASISTENCIALES COMO FUNDAMENTO DE SU APOSTOLADO EN LA PARROQUIA SAN JOSÉ DE LA MONTAÑA……………………………………………………………………………………………….
PÁRROCOS QUE HICIERON HISTORIA EN ESTA PARROQUIA…………………………………
FRAILES CAPUCHINOS QUE SIGUEN HACIENDO HISTORIA……………………………………
HIMNO DE LA PARROQUIA SAN JOSÉ DE LA MONTAÑA
IDEAS CONCLUSIVAS
FUENTES BIBLIOGRAFICAS
LA PARROQUIA SAN JOSÉ DE LA MONTAÑA: CIEN AÑOS DE VIDA PASTORAL BAJO LA DIRECCIÓN DE LOS FRAILES CAPUCHINOS (1926-2026)
1. INTRODUCCIÓN
La labor apostólica de los capuchinos, al llegar a la región del norte o Cibao se inició en Santiago de los Caballeros y se establecen con residencia más o menos fija en la Iglesia San Antonio de Padua hacia 1912.
Para el año 1919 se inicia la construcción de la antigua iglesia de san José que se concluye en 1921. Fue erigida parroquia en 1926, extendiéndose hacia el oeste hasta Villa González.
La iglesia actual se inauguró en 1958, comprendiendo otras capillas adyacentes como san Antonio, Santa Clara, Pueblo Nuevo y algunos campos.
2. OBRAS ASISTENCIALES COMO FUNDAMENTO DE SU APOSTOLADO EN LA PARROQUIA SAN JOSÉ.
Nuestros misioneros capuchinos de la primera generación en esta parroquia, usaban la forma más simple como el socorrer a los pobres y enfermos, acoger a los niños desamparados en escuelas, promovieron el pan de los pobres de la Unión de San Antonio, programas de caridad de la Orden Franciscana Seglar, limosna a los pordioseros desde la fraternidad, era el modo tradicional de entender las obras de caridad.
Otra forma de vida pastoral en esta parroquia muy significativa es que se introduce la pastoral social al implementar consultorios y dispensarios médicos, diversos programas de Cáritas, como costureros, clases de cocina, de floristería, cerámica, etc.
Construyeron guardería infantil, capellanías en hospitales, repartos de ropas a los más necesitados.
La parroquia San José de la Montaña desde sus orígenes se ha caracterizado como una parroquia emblemática no solo para los capuchinos sino también para la Arquidiócesis de
Santiago de Los Caballeros.
La pastoral social, aunque en diversos estilos según los tiempos, fue una actividad notable de los capuchinos desde el inicio de la misión hasta el presente en esta emblemática parroquia. En efecto, un hecho muy significativo en la labor pastoral de los capuchinos de los primeros tiempos, es que en sus actividades religiosas primaba esa integración entre la predicación, sacramentos, vida cristiana, iban juntos los centros de formación humana como son los colegios.
Los primeros capuchinos que ejercieron su labor pastoral en esta parroquia le dieron especial importancia al papel de la educación y por ello crearon numerosas escuelas y colegios con la finalidad de formar humana y religiosamente a los niños; la pastoral educativa era un elemento distintivo en esta parroquia de san José.
Entre las obras sociales más importantes que se realizaron en esta parroquia sus inicios podemos enumerar las siguientes:
a) La cooperativa de ahorros y préstamos “Polanco” (1954)
b) La Cooperativa San Francisco de Asís del Ensanche Bermúdez (1955).
c) El colegio San José (1919-1923) primera etapa: (1957), segunda etapa en nuevo edificio.
d)
e) Colegio San Francisco (1961) en su antiguo local, desde 1968 en el local actual.
f) Escuela Vocacional “Paz y Bien” educación para el hogar, clubes juveniles, semanas
g) de cultura popular, cursos de alfabetización, entre otros.
3. FRAILES CAPUCHINOS QUE HAN HECHO HISTORIA EN LA PARROQUIA SAN JOSE DE LA MONTAÑA
La revista “En Misión en Santo Domingo” se hace eco de las muchísimas personas que, constantemente, testimonian los gratos recuerdos de tantos frailes nuestros que han dejado una huella imborrable en sus correrías apostólicas en esta parroquia de San José y que han hecho sentirse muy cerca del Señor a los hombres y mujeres sencillos de buena voluntad.
Los parroquianos que peinan cana en aun tienen grabada en su memoria la imagen del humilde frailecito andaluz, dominicano o de otro horizonte del continente que un día arribó a este pueblo santiaguero para formar parte de la vida pastoral de esta parroquia.
Aquel simpático hombre que nos contaba chistes y que nos cautivaba, sobre todo, con su sencillez y con su cercanía. Cómo no recordar el cómo nuestro sector y zonas aledaña, en masa, acudía a los sermones de la misa dominicales, al Rosario de la Aurora, a las confesiones, a las procesiones, a los viacrucis… y no se diga a la hora del adiós, cuando este fraile era trasladado a otro lugar, todos emocionantes y con lágrimas en los ojos, acudían a despedirle a la plaza o patio de la parroquia.
Muchos de nosotros debemos nuestra vocación religiosa o sacramental a ese testimonio de vida evangélica de aquel heraldo, misionero y santo.
El fraile capuchino siempre ha sido un referente para comprender que Jesús es amor, comprensión solidaridad, tolerancia… su labor en cualquier lugar en parroquia que a trabajado ha sido y sigue siendo, la de animar, impulsar y hacer rentables los talentos que a cada uno Dios le ha dado. Ha sido impulsador de cooperativas, de múltiples actividades sociales, culturales, religiosas, y hoy en día muchísimas, actos, romerías, y ferias nacieron a iniciativa suya.
(ver. Revista capuchina. “En Misión en Santo Domingo. n.30.abril-junio 2006).
FRAILES QUE HICIERON HISTORIA
En la primera generación y que realizaron su labor pastoral en la Parroquia San José de la Montaña
A. FR. ANSELMO DE BENAMEJÍ (1880-1959)
Nació en Benamejí, pueblo de la provincia de Córdoba, el 17 de junio de 1880. Su nombre de pila bautismal Antonio Torres Arjona.
Cuando tenía 17 años ingresó en la Orden capuchina de la Provincia de Andalucía. En 1909 marchó a Santo Domingo, conjuntamente con cuatro frailes, siendo éstos pionero de la misión en Santo Domingo.
Su labor apostólica en el país fue muy notable. El periódico EL Caribe en un artículo resalta lo siguiente: cincuenta años después de haber llegado al país con cuatro compañeros de la Orden capuchina, Fr. Anselmo de Benamejí realiza con la más absoluta humildad la labor pastoral y caritativa, características de los frailes capuchino en esta parroquia de San José de la Montaña”
Miles de jóvenes de las diferentes parroquias donde ha prestado su servicio de vida pastoral (Santo Domingo, San Pedro de Macorís y Santiago) han escuchado sus consejos oportunos y con él han aprendido sus primeras oraciones, mientras el consagrado religioso se dedicaba a labores de carpintería o a la curiosa confección de rosarios que regalaba al primer interesado.
En Santiago de los Caballeros, desarrolló la mayor parte de sus labores pastorales.
Fr. Anselmito, como le solía llamar la feligresía por su gran cercana con el pueblo, se dedicaba en su tiempo libre a la labor de restaurar los altares de la Iglesia. En santo Domingo trabajó como profesor en la Escuela Divina Pastora.
Motivó las procesiones, los viacrucis, rosario, las confesiones.
Su vida pastoral siempre tuvo integrada a la vida fraterna.
Murió el 17 de septiembre, día de la impresión de las llagas de nuestro seráfico padre San Francisco de Asís 1959 en la residencia de Santiago de los Caballeros.
B. FR. JESUS PEDRO ABAD (1890-1973)
Fue de los capuchinos, pioneros de la evangelización de Santo Domingo, de agradable trato, de espíritu pacifico, de extraordinaria sencillez y porte franciscano. Fue siempre un religioso muy estimado de sus amigos y de toda la feligresía.
En la parroquia San José de la Montaña, desarrolló un eficaz trabajo donde construyó varias obras sociales. Formó parte de los constructores de la Iglesia San José y el colegio del mismo nombre. Jugó un papel preponderante en la labor docente y pastoral en esta parroquia de San José. Vuelto a Andalucía, dedicaría el resto de su vida la tarea de formar nuevas vocaciones. Fue superior de la Fraternidad de Ubrique, después sería rector y párroco del Santuario de Nuestra Señora de la Victoria, Patrona de Melilla.
Muere en Córdoba a los 83 años el 12 de agosto de 1973. El largo curso de su existencia, estuvo lleno de frutos de servicio y de testimonio franciscano.
C. FR. AMBROSIO DE CÓRDOBA (1896-1973)
Nace en Córdoba, 4 de febrero de 1896. Vistió el santo hábito el 29 de junio de 1914; todavía estudiante marcha en 1922 a las misiones de la Orden en la República Dominicana, en donde se ordenó de sacerdote en junio de 1923. Le tocaron los tiempos heroicos que siguieron a la fundación de la Misión, cuando no existía jeeps, ni Land Rover para transitar por los caminos cenagosos o polvorientos; cuando había que cruzar los ríos a lomo de mulos, cuando había que trepar lomas y bajar cañadas por los campos de dicayagua, sabana Iglesia, Jánico, san José de la Mata, entre otras comarcas.
La vida pastoral de este hijo de san Francisco consistió en sufrir y gozar con el llanto y la risa de los dominicanos y no fue un extraño ante las grandes vicisitudes de la comunidad parroquial, fue siempre el hombre del consejo oportuno, el hermano más en la familia.
Ejerció su ministerio sacerdotal con mucho sacrificio y entrega en esta parroquia donde mayormente pernoctó por una larga temporada hasta su muerte acaecida el 11 de enero de 1973.
D. FR, ATANASIO DE COGOLLOS VEGA (1905-1984)
Nace en Cogollos Vega, el 13 de septiembre de 1905. Se ordenó de sacerdote en Sevilla el 6 de enero de 1929 y llegó a la Misión de Santo Domingo el 19 de noviembre de 1931.
Su mayor vida pastoral la desarrolló en la ciudad de Santiago, en la Parroquia San José de la Montaña donde ejerció una ardua labor pastoral.
Reproducimos algunos fragmentos del artículo del Ministro Provincial de Andalucía. Fr. Mariano Ibáñez, quien nos expone la fisonomía y la santidad de vida pastoral de un misionero capuchino:
“Quero empezar este recuerdo pensando que a quien dirijo estas letras goza ya en Dios la gran fiesta de la misma alegría que él en vida, supo compartir con sus hermanos… Era Fr Atanasio un remolino de gracia y de ternura, de simplicidad evangélica y de una nobleza casi de niño. Fr. Atanasio siempre estaba alegre, siempre con la sonrisa a flor de labios. nunca los vieron sus feligreses con cara triste, era muy jocoso, supo transmitir la santa alegría tanto en el convento con sus compañeros como con sus feligreses.
En fin, fray Atanasio cuidó de la vida con su inocencia, formó su amor con el trabajo duro y como si su cuerpo fuera un instrumento de alabanza…”
Murió en Santiago de los Caballeros, el 26 de octubre de 1984. Una multitudinaria feligresía lloró su partida acompañándolo hasta su última morada en el Cementerio de la 30 de Marzo de esta ciudad.
FRAY NICOLAS SAMERON GARRIDO (FR. JUSTO DE BERJA, 1919-1997)
Fecha y lugar de nacimiento: 12 de noviembre, Almería, (BERJA) Andalucía, España
Fecha de ingreso en la Orden 1941.
Profesión religiosa, agosto 30,1942
Ordenación sacerdotal: 2 de julio 1947.
Fecha de obediencia para las misiones: 10 de julio 1950
Lugar de la misión: República Dominicana.
El P. Justo de Berja fue uno de los frailes más queridos por los dominicanos, especialmente, donde ejerció su vida pastoral: San Pedro de Macorís (1951-1954): Santo Domingo (1980 ss). Santiago de los Caballeros (por varios períodos 1954 en adelante)
El P. Justo es recordado con mucho cariño por ese gran espíritu de humildad y cercanía con la gente sencilla.
En Santiago de los Caballeros, en la Parroquia San José de la Montaña, realizó una intensa labor pastoral en los años sesenta. Fue uno de los fundadores del Colegio San Francisco de Asís y San José: hizo cambios muy significativos que favorecieron a la comunidad parroquial.
Fue un pastor con olor a oveja que siempre veló por las ovejas de manera vigilante.
En los archivos de Sevilla, se conserva una crónica de su labor pastoral en la Rep. Dom.
Las fiestas patronales en honor a San José se celebraban en un ambiente de mucha alegría y gran entusiasmo, con la participación de algunos miembros de las autoridades del Gobierno central y municipal.
La calidad pastoral del padre justo en esta parroquia de San José, no eximió nunca la tibieza de su feligresía. Mantuvo una estrecha comunicación con el extinto presidente Joaquín Balaguer y su familia a quienes asistía espiritualmente, aprovechaba la oportunidad para hacerle algunas solicitudes en favor de personas de escasos recursos, por ejemplo, casas, trabajo, medicamento, etc. Nunca se benefició a modo personal de esa ayuda de esa ayuda si no que la distribuyó conforme a las necesidades de la comunidad parroquial.
FRAY MAXIMO RODRÍGUEZ (1951-2023)
Fecha y lugar de nacimiento: 18 de noviembre, en Higüey, provincia La Altagracia
Fecha de ingreso a la Orden y su profesión religiosa. 15 de agosto 1979 y profesa 15 de agosto 1980 en Santiago de los Caballeros. Su fecha de ordenación sacerdotal fue el 27 de agosto de 1983.
Durante su ministerio sacerdotal trabajó en tres de las parroquias emblemáticas de los frailes capuchinos: San Pedro Apóstol (San Pedro de Macorís 1984-1992); San Miguel- Las Mercedes (1992-1995). En septiembre de 1995, pasó a la parroquia San José de la Montaña y desde ahí atendía San Antonio y San Andrés de la Otra Banda con sus capillas, donde permaneció 9 años. Volvió nuevamente a Santo Domingo, a la parroquia San Miguel y el Templo Patronal Nuestras Señora de las Mercedes (2004-2010). Y desde el 8 de agosto del 2010 estuvo de nuevo en Santiago de los Caballeros, en la parroquia San José de la Montaña.
Trabajó como director administrativo de los colegios San José y San Francisco y como director espiritual del Movimiento de Cursillos de Cristiandad. Tras durar 7 años como párroco en esta parroquia, la Orden de los frailes capuchinos lo nombran nuevamente párroco y rector en San Miguel- Las Mercedes. Ya convaleciente y muy aquejado de salud interrumpe su ejercicio pastoral y desde su lecho ofrecía su dirección espiritual a muchas personas que acudían a él, incluyendo políticos, funcionarios del Gobierno, entre otras personalidades; él aprovechaba la presencia de los funcionarios para entregarle currículum vitae, recetas, y otras muchas solicitudes que le hacían los pobres.
Fr. Máximo, durante su convalecencia mantuvo su estado de ánimo muy elevado; cuando perdió una de sus piernas a causa de la diabetes, en su aspecto emocional no sucumbió.
Causó una gran lluvia de aplausos y emoción la Eucaristía que celebró posterior a la pérdida de su pierna cuando expresó en la homilía: “He perdido una pierna, pero no la cabeza”.
El presidente Luís Abinader define como amigo de fe y de lucha en el siguiente comunicado: “En medio de la nochebuena, con mi madre y toda mi familia me llega una noticia triste: ha fallecido un amigo de fe y de luchas, Fr. Máximo Rodríguez, ex rector de Las Mercedes, paz a su alma. expresó el mandatario a través de su red social de X, antiguo Twitter.
Fray Máximo se destacó en el uso de los Medios de Comunicación Social, desde ahí propagaba la predicación del Evangelio. Su estilo en su prédica hablaba con fluidez, entonación y dicción. Al celebrar el 40 aniversario de su vida sacerdotal, celebró una solemne Eucaristía en las tres parroquias donde fue párroco. San Pedro de Macorís, Santo Domingo y Santiago de los Caballeros, como frutos de sus cuarenta años de vida sacerdotal dejó en un documental su labor pastoral en esas tres emblemáticas parroquias.
FRAILES QUE HAN HECHO HISTORIA EN LA PARROQUIA SAN JOSÉ DE LA MONTAÑA Y QUE AÚN VIVEN ENTRE NOSOTROS
ANTONIO CARRASCO HURTADO (FR. ESTEBAN. 1937)
Fecha y lugar de nacimiento: Cogollo Vega, provincia de Granada. Ingresa en la Orden el 11 de agosto 1952 y profesa 1953. Se ordenó sacerdote el 18 de junio de 1961.
Fecha de obediencia para las misiones en la República Dominicana 1962. Vino como relevo a continuar trillando por aquellos caminos inhóspitos de la misión en Santo Domingo.
A su llegada, la sociedad dominicana atravesaba por una profunda crisis socioeconómica y política y se respiraba un ambiente de incertidumbre a causa de la muerte del dictador Rafael L. Trujillo.
Desempeñó en la parroquia San José una muy buena labor pastoral. Fomentó la piedad popular: el rezo del Rosario, las procesiones, peregrinaciones, viacrucis. Como párroco fue un infatigable trabajador en diferentes áreas de la vida cotidiana; asistía con frecuencia a los enfermos de la comunidad parroquial. Fr. Esteban, al igual que Fr. Justo, mantuvo estrechos vínculos con el fenecido líder político Joaquín Balaguer, quien le facilitó viviendas para personas pobres. Así definió fray Esteban su apostolado y su calidad pastoral.
En la actualidad, Fr. Esteban está en Granada. A sus 87 años nos visita y pasa el invierno en nuestro país, siempre tendiendo las manos a los necesitados.
FRAY FELIX PLACENCIA PÉREZ
Nació en Las Canas, La Vega, R. D., 10 de febrero de 1962. Ingresa en la Orden de 1991. Su ordenación sacerdotal 1996.
Ha sido párroco en la parroquia San Antonio de Padua (2001-2007); la Presentación del Señor (2007-2008) y luego pasa a la Parroquia San José de la Montaña, donde realizó una muy significativa labor pastoral, manteniendo una cercanía con los fieles; siempre dispuesto a la visita a los sectores, los enfermos, y realizó otras muchas actividades, peregrinaciones, viacrucis, procesiones, etc.
Fue director administrativo de los Colegios San José y San Francisco de Asís.
FRAY JOSE ARELLANO GUERRERO (FLORENCIO)
Nació el 17 de marzo de 1929 en Granada, España; tomó hábito en la Orden el 30 de septiembre de 1946. Su ordenación sacerdotal se celebró en Antequera el 16 de agosto de 1953, cuando apenas contaba con 24 años de edad. El recién ordenado sacerdote viajó a Santo Domingo, el 15 de septiembre de 1954, para iniciar su fecundo y fructífero ministerio, iniciando en la parroquia san Carlos Borromeo, en la Capital; también prestó su servicio en la región sur en la zona de Duvergé.
A fines de la década de los años 50 fue destinado párroco de la parroquia San José de la Montaña de Santiago, donde permaneció 3 años y luego regresó a Santo Domingo y después de ejercer oficio de superior de la Orden (1969-1971). En 1971 quedó designado párroco de la parroquia Nuestra Señora de las Mercedes, durante 18 años consecutivos, cuando fue transferido nuevamente como párroco de la parroquia San José de la Montaña. Después de agotar seis años (1989-1995) en la ciudad de Santiago de los Caballeros vuelve a San Miguel y a Las Mercedes.
El padre José Arellano regresó a Granada, España, a sus 95 años mantiene su lucidez y recuerda con nostalgia a los dominicanos donde ejerció su ministerio pastoral.
FRAY KELVIS ACEVEDO ALMONTE
Nace en Maimón, Provincia Monseñor Nouel (Bonao) 18 de abril de 1979.
Ingresa en la Orden en 1999 y se ordena de sacerdote el 03 de febrero de 2008).
Realizó su labor pastoral en esta parroquia de San José de la Montaña en el periodo 2017-2020. Antes de concluir su periodo en esta parroquia fue nombrado Capellán en la Capilla del Palacio Nacional, en el gobierno de Luís Abinader y es párroco de la parroquia San Francisco de Asís (Paz y Bien). Siempre le ha caracterizado su alegría y dinamismo en las celebraciones litúrgicas.
FRAY INOCENCIO SANCHEZ
Nació en la Guázuma de Yamasá, el día 4 de agosto de 1970. Ingresa en la Orden el 27 de agosto 1994; ordenado sacerdote en el 2004. Fue párroco de esta parroquia de San José de la Montaña en el periodo 2021-2024. Durante su estadía le tocó la reparación del templo parroquial con los fondos recibidos del Gobierno central. Concluido su periodo en esta parroquia, fue nombrado párroco de la parroquia San Agustín en el Brisal, Santo Domingo Este. Fr. Inocencio es licenciado en Psicología.
FRAY JOSE DAVID VASQUEZ GUZMAN
Nace en Puñal, Santiago de los Caballeros, el 28 de octubre de 1959.
Se ordenó de sacerdote el 8 de diciembre de 1989. Estudió teología bíblica en la Universidad Pontificia Gregoriana, en Roma y luego realizó un posgrado en Teología en la Universidad de Comillas, España. Ha sido Ministro Viceprovincial y Custodio por varios períodos, profesor de Sagradas Escrituras, Griego y Hebreo en la Universidad Pontificia Madre y Maestra y el Seminario Pontificio Santo Tomás de Aquino por varias décadas.
En el ejercicio pastoral ha hecho significativos aportes en las parroquias donde ha prestado sus servicios como párroco. En el periodo 2004-2007 fue designado párroco de la parroquia San José de la Montaña, creó un Directorio Pastoral con el título: “Parroquia San José de la Montaña, Escuela y Casa de Comunión” (2007), donde recoge las experiencias pastorales de sus tres años, durante los cuales la parroquia ha ido dando pasos concretos hacia una mayor organización pastoral, consolidando las estructuras ya existentes y creando otras nuevas que ayudarán a poner en marcha el tercer Plan Arquidiocesano de pastoral. (Fr. David:” Directorio”)
Fr. David Vásquez, como párroco de esta parroquia de San José, ha dado signos clarividentes de una auténtica caridad pastoral. Una de las cualidades que mejor define a un pastor en su respectiva parroquia es su organización pastoral. Cuando la parroquia está organizada, sus fieles se conducen bajo una mejor dirección, hay más comunicación y un mejor desenvolvimiento en la vida pastoral.
Por segunda vez y por un nuevo período Fr. J. David, regresa a la parroquia San José y esta vez viene con nuevo método, nuevas innovaciones con el fin de reorganizar en algunos aspectos el Plan de Pastoral.
Según nuestras constituciones, la lectura evangélica de los signos de los tiempos exige un aprendizaje que cada hermano debe realizar (Const.147,1) y qué mejor que aplicarlo en la vida pastoral. Esta lectura de los signos de nuestros tiempos es posible, cuando el pastor en comunión con su consejo realiza cambios que favorecen la vida pastoral de la parroquia.
Transcribimos a continuación, un Himno de la autoría de Fr. J. David Vásquez (2007) sobre la Parroquia San José de la Montaña:
HIMNO DE LA PARROQUIA SAN JOSE DE LA MONTAÑA
Baracoeros y joyeros, vengamos todos a la vez,
a nuestro centro de unidad, de unidad, ¡La parroquia san José!
Antorcha viva de nuestros barrios,
hermoso símbolo de la fe,
fuente viva de paz, de humildad y sencillez.
Asentada junta al Yaque, ¡Oh Iglesia San José!
¡Qué elegante te levantas, sin miedo ni timidez!
Futuro de nuestros barrios, esperanza de la niñez
¡Que viva para siempre mi parroquia San José!
Cuantos hijos incontables recibieron la fe
De tus pechos, se nutrieron,
¡Parroquia José! Los sectores todos aguardan
el evangelio que les des,
en continuo crecimiento y saciar en Dios su sed
Como el néctar en los labios y agradable como es,
El domingo encontramos en Cristo que es nuestra fe,
Acogidos nos sentimos sin barreras ni pared.
¡Es dichosa nuestra casa, mi parroquia San José!
Donde hay vida y esperanza, es la casa de unidad,
Con la Orden Franciscana y laicos que siembran paz.
Nuestro pueblo con esperanza a tu atrio llegando está.
Van cantando alabanzas y tus puertas se abren más.
Como se puede apreciar en este himno, su contenido refleja una fotografía real y efectiva de la costumbre, tradiciones y realidad social de este templo parroquial enclavado en el corazón de ese populoso barrio de Baracoa. Sus versos evocan esa fidelidad afectiva y vivencial de los feligreses en comunión con su pastor. Además, en este himno podemos descubrir la calidad pastoral de un hijo de esta ciudad de Santiago de los Caballeros cuyo perfil pastoral responde a las exigencias del Papa Francisco, en su discurso del 4to. Domingo de Pascua, expresaba que el pastor de nuestro tiempo debe estar: “Adelante, en Medio y Detrás de las ovejas en su respectiva comunidad parroquial” (4to. Domingo de pascua 2021)
Nuestras Constituciones capuchinas también resaltan esa cercanía al pueblo: “Las opciones fundamentales de la Reforma Capuchina que les llevaron a esa peculiar cercanía al pueblo:
a) Obediencia al Padre que prefiere a los pobres Cont.59,2)
b) El ejemplo de Cristo, enviado a evangelizar a los pobres (59,1;114,1;154,4)
c) Él mismo se hizo pobre (14,4;59,1.2.5)
d) San Francisco siguió ese camino (59,3;154,4)
e) La minoridad exige que los menores vivan entre los pobres (12,2)
¿Cómo se logra conservar esa peculiar cercanía al pueblo?
Anunciando el Evangelio sobre todo a los pobres; siendo solidarios con ellos, (59,5.7)
Compartiendo con ellos los bienes que se poseen (60,1)
Proclamando el mensaje de conversión a los poderosos y dominadores (145,4)
Promoviendo la religiosidad popular y apoyando sus manifestaciones de fe, al mismo tiempo que tratamos de asumirlas como propias (46,4)
Asumiendo la cultura en su medio vital, para vivir con ellos y como ellos (60,6)
En fin, la lectura del Evangelio de cada día, nos lleva a la conclusión de que Jesús nace en un estrato social pobre, que opta por los pobres, que sus oyentes asiduos son gente sencilla y que el objetivo fundamental de su predicación (la imagen del Reino) encuentra modelos en la gente sencilla del pueblo.
Que nuestro primordial objetivo sea rescatar la tradición capuchina de servicio y presencia entre la gente del pueblo, actualizándola en nuestras parroquias, mediante la solidaridad afectiva y efectiva, manteniendo la cercanía con los sectores vulnerables de nuestras parroquias, poniendo el oído en los reclamos de los necesitados.
En la parte introductoria del Directorio pastoral, señalando al documento de Aparecida (174-175), un texto clave para la promoción de una vida pastoral en sintonía con los signos de nuestros tiempos:
Para que los miembros de la parroquia puedan responder a los nuevos desafíos de la sociedad, en cuanto discípulos y misioneros de Jesucristo en sus respectivos ámbitos y ambientes, es necesario que reciban una sólida y esperada formación. Los mejores esfuerzos de las parroquias en el proceso de este tercer milenio, deben estar en la convocatoria y en la formación de los laicos misioneros. Solamente a través de la multiplicación de ellos podemos responder a las exigencias misioneras del momento actual.
(Vásquez Guzmán: Diciembre 2007)
Ideas Conclusivas
En primer lugar, debo aclarar que la memoria histórica que hemos realizado, no agosta el total del recorrido o trayectoria de los frailes capuchinos que han ejercidos su vida pastoral en esta parroquia de San José, por algunas limitantes en dicha investigación, puesto que para realizar un auténtico enfoque histórico es fundamental contar con documentos fidedignos o testimonio escritos que nos ayuden a facilitar el trabajo de investigación.
La historia es acontecer; donde no hay acontecimiento no hay historia.
El evangelista Juan le dice a Nicodemo: En verdad, en verdad te digo que hablamos lo que sabemos y damos testimonio de lo que hemos visto, pero vosotros no recibís nuestros testimonios. (Juan 3,11). Hemos realizado este trabajo conforme a las crónicas, revistas (Adalid Seráfico) cuyos contenidos narran sus ejercicios pastorales en esta parroquia. Ahora bien, eso no significa los demás párrocos que realizaron su vida pastoral en esta parroquia hayan realizado su trabajo, de ninguna manera; ellos también son partes de la labor pastoral de estos cien años de vida pastoral y son recordados por su gran desempeño en la vida sacramentaria que ejercieron con gran sacrificios y entregas.
La Parroquia San José de la Montaña, desde que fue erigida, en 1926 ha sido administrada por los frailes capuchinos hasta nuestros días. Ha tenido las gracias de ser dirigida por frailes que han realizado una valiosa labor pastoral cuyos sacrificios y entregas han quedado registrado en la historia local y en el corazón de este pueblo santiaguero. Los que aun peinan canas recuerdan con nostalgias el paso de esos primeros capuchinos de Andalucía, España que hicieron historia en esta populosa parroquia enclavada en el corazón del Barrio Baracoa.
Generaciones, tras generaciones se encuentran registrados los libros de bautismo y matrimonios en los archivos que reposan en la oficina parroquial. Hoy en día, los hijos, nietos, bisnietos y tataranietos de sus antecesores testifican que sus abuelos fueron bautizados o se casaron en esta parroquia y sienten la satisfacción de que se encuentren registrados aquí.
Una de la meta que se propone alcanzar el párroco actual (Fr. David) en este periodo, para responder a las nuevas exigencias de la tecnología es digitar las actas de bautismos y matrimonios para facilitar el trabajo y ahorrar tiempos. De esta forma se busca responder a las exigencias del Documento de Aparecida: y para ello ha de entrar en un proceso de renovación de sus estructuras como proponen las conclusiones de Aparecida. (Aparecida 172)
FUENTES BIBLIOGRÁFICAS
1. ESTADÍSTICA DE LOS HERMANOS MENORES CAPUCHINOS DE ANDALUCÍA Y VICE PROVINCIA DE SANTO DOMINGO (TRIENIO 1991-1994) SEVILLA. 1993
2. BAUTISTA GUERRERO, SANTIAGO, FRAY. PRIMER CENTENARIO DE LOS HERMANOS CAPUCHINOS EN RD. SANTO DOMINGO 2009. ED. ESCORPION
3. BAUTISTA GUERRERO, SANTIAGO. PERSPECTIVA HISTÓRICA DE LA ACCIÓN MISIONERA DE LOS FRAILES CAP. EN STO.DGO. 1ERA. ED.2020
4. CAPUCHINOS EN MISIÓN EN SANTO DOMINGO. AÑO VIII. N.30. ABRIL-MAYO 2006.
5. REVISTA EL ADALID SERÁFICO: AÑOS NÚMERO MES AÑO.
XXXIV 982 ENERO 1934.
XXXIV 984 NOVIEMBRE 1934.
XXXVII 1030 ENERO 1937
LX 1272 FEBRERO 1958
LX 1288 AGOSTO 1959
LX 1289 SEPTIEMBRE 1959
LX 1290 OCTUBRE 1959
LXXXV 1249 NOVIEMBRE 1984
6. VÁSQUEZ GUZMAN, J. DAVID. DIRECTORIO PASTORAL DICIEMBRE 2007.