Si Volviera a Tener 14 años Tomaría la Decisión de ser Sacerdotes 

0
9

Con la presencia del Nuncio Apostólico Piergiorgio Bertoldi, autoridades de la provincia y del país, el Arzobispo emérito Monseñor Ramón Benito de La Rosa y Carpio celebró sus 60 años de Ordena­ción Presbiteral, con una Eucaristía en la Catedral Metropoli­tana Santiago Após­tol El Mayor.

En sus Bodas de Diamante, Monse­ñor de la rosa agra­deció a Dios y a la Iglesia por el recorrido realizado como sacerdote en las provincias de San­tiago, Higüey y San­to Domingo, las cua­les le enseñaron a ser pastor, y haciendo alusión al salmis­ta expresó; “Cómo pagaré al Señor todo el bien que me ha hecho”.

Resaltó la importancia del mes de ene­ro, mes de la Virgen de la Altagracia, el cual está vinculado a su vocación presbiteral.

“Si volviera a tener 14 años y en esa edad tuviera que tomar una decisión, volvería a ser sacerdote y volvería a elegir al Señor como mi única herencia. Me siento plenamente realizado y he cum­plido la tarea que Dios me ha asignado”, afirmó el también prolífico escri­tor.

Mons. Jesús María de Jesús Moya, Obispo Emérito de San Francisco de Macorís, destacó la trayectoria de servicio de Monseñor De la Rosa en su labor pastoral  

De La Rosa, lo calificó como figura cla­ve “Fue marcado por su vocación des­de su nacimiento, algo anticipado por su abuela, lo que demuestra lo importante que es la fami­lia para una perso­na”.

En las palabras de clausura, el Nuncio Apostólico, Monse­ñor Piergiorgio Ber­toldi, lo felicitó por el testimonio de 60 años y le deseó que continúe iluminando la fe de todos los do­minicanos.

Ramón Benito de La Rosa y Carpio fue ordenado el 23 de enero de 1965 por Monseñor Juan Fé­lix Pepén, en el Viejo Santuario de su tie­rra natal, Higüey. 

Además, fue el pri­mer rector de la Ba­sílica Catedral Nuestra Señora de la Altagracia y el primer rector del Seminario Menor de Higüey. Profesor en el Colegio Sagrado Corazón de Jesús, de La Romana y Ad­ministrador Diocesa­no en la transición de Monseñor Pe­pén.

Fue obispo auxiliar de Santo Domingo  (1989-1995), Obispo de La Altagracia (1995-2003), y Arzo­bispo Metropolitano de Santiago (2003-2015). Ha realizado su labor misionera en 12 provincias del país.  

Pastoral Arquidiocesana de Comunicación

Santiago, 25 de enero 2025