-Fray Radhames Abreu

En estos días, en los cuales, oímos hablar mucho de reforma, quise profundizar en el significado de la palabra, el cual no es otro que, “volver a formar, rehacer. Modificar algo con la intención, por lo general, de mejorarlo”.

Partiendo de todo eso, entonces entiendo que nuestra sociedad dominicana necesita de una reforma, de una transformación profunda, para un mejor y próspero bienestar de la vida de sus habitantes o componentes.

Los hechos impactantes y alarmantes que se registran, constituyen especie  de canto de sirena que como pre-aviso nos indican que vivimos y experimentamos momentos y situaciones muy lamentables.

1.- Madre decapita o corta la cabeza a su hija, porque Dios se lo pidió

2.-Otra madre, con una hija en brazos se lanza de una cuarta planta y fallecen las dos.

3.Por un roce a su vehículo o por un parqueo, un hombre armado dispone de la vida del otro.

A estos hechos, agreguéles otros como:

  • Agresiones físicas y verbal, en los medios de comunicación. Injurias, difamación.
  • Infidelidad conyugal.
  • Feminicidios.
  • Suicidios.
  • Secuestros.
  • Desapariciones.
  • Permisividad para toda violación de la ética y la moral.
  • Abusos de menores.
  • Falta de empleos y oportunidades.
  • Aumento de la canasta familiar.
  • Violencia intrafamiliar.
  • Pecados de incesto.
  • Delincuencia.
  • Atracos.
  • Inseguridad ciudadana.
  • Crisis políticas.
  • Indelicadezas con los bienes del Estado. Problemas en educación y salud, que nunca faltan.
  • Solución a la problemática y condición de pobreza.
  •  Inmigración.

Después de esta radiografía a la sociedad en que vivimos actualmente, solo nos queda la alternativa de trabajar por una reforma de la sociedad.

Para que no nos resulte abstracto, esa reforma puede comenzar por la familia, por cada miembro. Pues, se oye que las reformas se harán a través de las instituciones, que supongo terminarán favoreciendo a toda familia como a toda la sociedad y a toda la nación.

Enfocarse en una reforma de una institución, es enfocarse necesariamente y proyectarse hacia una reforma de la sociedad. Necesitamos urgentemente, la ejecución de cambios sociales y cambios verdaderos y reales de una sociedad emprendedora y futurista.