Estamos de fiesta y San Miguel tiene su casa

En la República Dominicana, la fiesta patronal comienza con el novenario. Y la Iglesia siempre trata de facilitar a los feligreses la posibilidad de conocer y venerar al Santo y poder conseguir la indulgencia de manera especial.

Un santuario debe tener esta opción para siempre. Y las peregrinaciones hacia el santuario tienen este fin. Además, el ambiente y la simbología del santo deben ser claras y emotivas.

Como narran los historiadores italianos, la gruta de apariciones de San Miguel del Gargano, tenía y tiene este poder y gracia. Cuando San Francisco visitó esta bella y celeste Basílica, al ver la imagen del Arcán­gel San Miguel, se sintió muy indigno de estar en Su presencia.

Retrocedía, sin dar la espalda para no ofender a este tan puro, brillante y majestuoso Arcángel. También, muchos otros santos sentían el pode­roso fluido de la presencia de Dios, presencia de santidad y pureza. Siempre salían fortalecidos y renovados por la confesión. Este poder es tan grande, que continua hoy en día y se extendió hasta República Dominica.

Desde el año 2014, el Arcángel San Miguel camina por la tierra Quisqueyana, trayendo la esperanza y fortaleza a todos, con su lema: ¡Quién como Dios!. Él señala a Dios como fuente del bien, de amor, verdad y belleza. También es un excelente defensor de la Iglesia. Por eso, llenos de fe, hoy, en su día de fiesta, le dedicamos estas palabras:

¡Santo Arcángel!, pudiste ver a través de las peregrinaciones por nuestra Patria qué tan necesario es que se extienda Tu Poder y Gracia sobre Ella. Como un signo de amor hacia Usted, le hemos preparado un lugar muy especial en Santiago de los Caballeros, para recodar aquellos tiempos de la Gruta de Gargano, donde comenzó todo.

Lo llaman Monte de San Ángelo, Basílica Celestial, Poderoso Santua­rio…, único santuario del mundo, bendecido no por la mano humana, sino por Ti mismo. Tantos nombres, tantos misterios, porque allí sucedieron y suceden muchas conversiones, muchas gracias y muchos milagros.

En Gargano fuiste Tú, quien bendijo la gruta, pues al Obispo le faltó la fe.

Monseñor Valentín Reynoso bendijo la Gruta de Santiago al comenzar el novenario. Y solo Te decimos: Aumenta nuestra fe y llena este lugar con el mismo Poder y Gracia de Dios, y presencia de todos los Ángeles, como tiene el Monte de Gargano.

Que sea fuente de inspiración hacia la santidad y alabanza a Dios. Inspira a los obispos y sacerdotes y todos los que sirven a Dios en la Iglesia, para que no te den la espalda en la lucha contra el mal. Que se dediquen con todo el corazón a la ejecución del III Plan de Pastoral. Que su labor sea poderosa.

Inspira y defiende las familias, niños, jóvenes, ancianos y enfermos, inspira a los atados por los vicios y el pecado hacia la conversión.

Te encomendamos al Ejercito Nacional, que está de fiesta y a todos quienes nos cuidan.

Pedimos mucho, porque sabemos que tu poder es más grande que todas nuestras peticiones.

Una vez más: ¡Gracias Arcángel San Miguel, ¡Esta es su casa!….