Prenotando: Que los rayos soleados de la asamblea lleguen a la Iglesia en Rep. Dominicana

Lectura Eclesiológica-Pastoral.

Las presente líneas intentan facilitar una reflexión a par­tir de los desafíos pasto­ra­les plasmados en dicha Asamblea, la cual tuvo lugar en México, desde el 21 al 28 de noviembre 2021.

I. *Marco de Referencia Temática*: Discípulos Mi­sioneros (1ª. parte del Men­saje de la Asamblea al Pue­blo de América Latina y el Caribe).

*Elementos básicos fundamentales (entre otros):

1. Todos somos discípulos misioneros en salida.

2. Repensar y relanzar la misión evangelizadora.

3. Profetismo y solidaridad efectiva con los pobres y vulnerables.

4. Un kairos para abrir nuevos caminos.

5. Una iglesia sinodal y misionera exige valentía y creatividad.

Ese extracto, a la manera de cotejo de síntesis, tiene por objetivo eclesial : invitar al pueblo de Dios en Rep. Dominicana a refrescar y re­descubrir su rol misionero en la comunidad concreta don­de practica su fe cristiana. Y ello implica esta corres­pon­sabilidad: *todo discípulo misionero evangeliza para extender el Reino de Dios, con el Evangelio, a la luz de las orientaciones fundamentales del Mensaje de la Asam­blea Eclesial, las cua­les, en palabras a nivel de nuestra gente común, di­ría­mos: *llevar el evangelio a toda criatura, y en el Amor Especial Pre­feren­cial de Dios Padre: evangelizar a los pobres y vul­ne­rables*.

II. MISIÓN EVANGELI­ZADORA desde los 12 de­safíos pastorales de la Asamblea Eclesial.

*Anotación Previa*: una lectura reposada-serena, sa­bo­reando la *naiboa* (= *la sustancia*) de los conteni­dos vitales en los 12 desa­fíos, con energía juvenil, de manera que la gente (niños, adolescentes, jóvenes y adultos) tenga la experiencia de sa­berse y sentirse *caminan­te de ia Caminata Misionera, tras las huellas de Jesucristo Misionero del Padre*, que no camina solo, que lo hace con estilo sinodal comunita­rio, es decir, en su Comuni­dad de Amor la Santísima Trinidad (*Padre-Hijo-Espí­ritu San­to*). Esa experiencia nos capa­cita, nos abre cora­zón y men­te para que Dios entre y nosotros entrar caminando con la gente, como pueblo de Dios, unidos, *a la luz del discernimiento comunitario* (Práctica consuetudinaria de la tradición de la Iglesia).

DE LOS DESAFÍOS EN SÍ *( Lectura hermenéutica = exégesis eclesial).

# 1. Trata sobre el rol de los jóvenes en la Iglesia.

Los adultos, con un poco de generosidad, tenemos que hacer el esfuerzo, dentro de la dinámica sinodal, para ­orientar y valorar la actitud prota­gónica de los jóvenes la cual enriquecerá la corresp­onsa­bilidad y la convivencia interhumana en las tareas prácticas de la Misión Evan­geliza­dora.

# 2. Enfoca el Reco­nocer y el Reparar.

Todo discípulo misionero que decide caminar tras las huellas de Jesucristo Maes­tro, ante las víctimas de injusticias sociales y eclesiales, está llamado al doble aprendizaje: *reconocer y reparar*, es decir, me encuentro con un empobrecido maltratado (An­te el maltratado: ¿solo la pala­bra de lamento y reconoci­miento compasivo? Pues, además de compadecerme, el evangelio me exige actuar, de no actuar, la evangelización queda manca=incompleta).

# 3. Toca un tema *pelia­gudo*: las mujeres y los mi­nisterios en la iglesia.

En la práctica de la Misión Evangelizadora, el peso ma­yor lo cargan las mujeres. Pa­ra honrar y justificar la co­rresponsabilidad eclesial, con este desafío 3, es inevitable la reforma en los justos términos respecto del gobierno y las estructuras eclesiales rectoras del quehacer pastoral, de manera que se dé la apertura efectiva en cuanto a las restricciones actuales.

# 4. Trata lo *Sagrado*: defender la dignidad de la vida. Es un desafío de vida o muerte.

# 5 y 9. Se plantea *erradi­car el Clericalismo*.

Es sintomático que ese tema sale dos veces entre los 12 desafíos de la Asamblea. Es de esperar que a medida que se trilla el camino sinodal co­munitario como pueblo de Dios, y redescubriendo nuestra identidad cristiana eclesial, por la condición cristiana de ser bautizados con el sa­cramento del mismo bautis­mo, entonces, tomaremos en serio la exigencia de uno de los desafíos más complejo-complicado de nuestra Igle­sia.

# 6. Ya es clásica en la Iglesia la visión sobre los lai­cos como *actores con auto­no­mía pública-social* en los espacios socio-cultural, so­cio-económico, socio-político y socio-eclesial. Pero esa autonomía no obstruye el rol *evangélico eclesial del presbítero* en dichos espacios.

# 7. De forma sutil, el en­foque formulado da la impresión de debilitar el compromiso radical del discípulo-misionero para con los po­bres. Es decir: con los pobres, no se trata solo del mero “es­cuchar” su clamor. Además de escuchar, hay que actuar. Es sintomático el hecho de que el desafío 7 explaya a los pobres con otras dos categorías: *excluidos y descartados*.

# 8. Es enriquecedor para los seminaristas para el seminario, y por ende para la iglesia, la introducción de nuevas temáticas en el sistema de formación de los seminarios, tales como la Ecología Inte­gral, Pueblos Originarios y otras.

# 10. Impactante Vital lo de la Ecología Integral desde el enfoque de los 4 sueños de la Exhortación Apostólica *Querida Amazonía*. Ello comporta una actitud compromisoria específica en las comunidades, respecto a  la *Crisis Ecológica del Conti­nente, lo cual, a su vez, con­lleva una visión global como Iglesia Continental.

# 11. Este desafío es de vida o muerte. ¿Razón?: se trata del *encuentro personal con Jesucristo encarnado en la realidad del Continente*.

Encontrar el Rostro Perso­nal de Jesucristo es encontrarlo en los pobres. Permitan traer a colación esta metáfora (sentido figurado), justo aho­ra en este tiempo litúrgico de Adviento: *a Jesús se llega por Belén (bajando a su cue­va), no por Jerusalén (subiendo palacios)*. El que tenga corazón y razón para sentir y discernir, que sienta y discierna.

# 12. En una opinión (a riesgo y suspicacia), se podría decir que, en términos cultu­rales de *Identidad oborigen y afro*, el 12 es el desafío más explícito y compromi­sario. Es precioso-profundo *defender vida, tierra y culturas*. En América Latina y el Caribe: *es decirlo todo*.

III. PRO-CONCLUSIÓN :

La susodicha *Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe*, es una gracia de Dios, que en términos prácticos, la Iglesia del Continente tiene que traducir para redescubrir la *Originalidad del camino sinodal, justamente en esta hora de *recrudecido invierno eclesial*. Y a propó­sito del actual statu inerte (aún con los inmensos esfuerzos del Papa Francisco y su tesis eclesiológica-pastoral : *una iglesia pobre para los pobres y en salida*), como también a propósito de la falta de una voluntad eclesial para con la justa y necesaria Reforma Eclesial, comparto dos preguntas con amor eclesial para la reflexión.

1. *Estarán la iglesias locales-diocesanas del Continente, y en particular las de Rep. Do­minicana, sintonizando con el nuevo espíritu *Conversión Pastoral*, que desde el inicio de su Ministerio, en su Cali­dad de *Pastor Universal*, el Papa Francisco *prédica y práctica*?.

2. *En el Continente se cuenta con una *voluntad eclesial de evangelio*, *para traducir los susodichos 12 desafíos en una práctica pastoral, que coadyuve a la inaplazable justa y necesaria Reforma Eclesial*?

Con fe terca como terca la esperanza, les saluda.

Julín Acosta  

Pbro. Diocesano.

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