Solo seguir el protocolo

0
324

Hace poco se dio a conocer el informe de la situación de las muertes maternas e infantiles en República Dominicana, del año 2023, de la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública. Si bien es cierto, que del mismo se indicó que en comparación con el año 2022, se redujo en un 7%, a pesar de esto, las cifras siguen siendo las no deseables para esta situación.  Esto es que, para el año 2023 se registraron en el país 3,012 decesos de menores de un año, para una tasa de 18.4%, y en el año 2022, fue de 19.8%.

No podemos siquiera sentirnos satisfechos porque la meta según expresara UNICEF, debe ser de 70 por cada 100 mil nacidos, y actualmente nos encontramos en 108 por cada 100 mil nacidos. O sea, que todavía nos resta mucho camino por recorrer para evitar esta cantidad de muertes.

Es bueno aclarar que estas altas tasas no tienen que ver con las parturientas extranjeras que dan a luz en este país.  Porque se ha querido utilizar este supuesto, como factor por el cual es tan alto el porcentaje, o para justificar la irresponsabilidad estatal histórica.

En el indicado informe más arriba, tenemos que el 78% de las muertes ocurrieron en el período neonatal, o sea, durante los primeros 28 días de nacido.  Eso es alarmante y debe llamar la atención de la clase médica, no solo en el área pediátrica, sino en el aspecto de salud en general, del por qué en esta etapa están muriendo tantos niños recién nacidos.  ¿Cuáles son los factores que están influyendo para que esto ocurra o de qué están careciendo las madres y sus bebés?

El año pasado, en conversación con el especialista en pediatría, doctor Julio Cabrera Pérez, nos indicaba varias cosas, entre ellas nos decía que el 80% de las muertes neonatales son evitables y esto porque no manejamos adecuadamente los protocolos y que de hacerlo, que son reglas y principios a seguir, se pudieran evitar la gran mayoría de ellas.

Debe haber un mayor nivel de información para las madres y familias, y aprender y discutir los yerros cometidos, porque en todo sistema se dan, pero se estudian y se busca evitar y sobre todo, existe la atención primaria.  Pero resulta contraproducente, que por el simple hecho de que no se siguen los protocolos, las directrices, estamos permitiendo que niños mueran y que sigamos estando en la palestra internacional.

Ojalá que podamos comprender que este tipo de estadísticas cada año quedan solamente en titulares y es como si no fueran importantes, o la mayor parte de la población, ni siquiera se entera de la realidad en la que nacen sus bebés, y nos referimos básicamente, a los que representan la mayoría, que son los que tienen que utilizar las maternidades de los hospitales públicos, porque la otra parte minoritaria de la población, no sufre de este problema y eso no es ni justo ni correcto.  Ojalá comencemos a cumplir al menos, los protocolos médicos ante los niños recién nacidos.