Realidades y extractos
Por: José Jordi Veras Rodríguez.
A las nuevas generaciones, a nuestros hijos, debemos enseñarles o recordarles la importancia de mejorarse a ellos mismos, que el enfoque no sea solamente por el resultado sino por la manera en que llevan a cabo lo que les toque realizar.
Porque hay quienes pueden dar respuesta ante un trabajo o una labor determinada pero lo hace a su tiempo o a su requerimiento y sin importar las dilaciones o las promesas que se han dejado de cumplir.
¿Qué es aquello que nos puede mover y llevar a cabo una labor cualquiera? El compromiso y el empeño que podamos darle a cada rol que se nos asigne. Hoy día, vemos casos que ha dejado de estar el elemento de brindar eficacia y actitud ante lo que se lleva a cabo.
A veces lo que nos diferencia entre los seres humanos es la competencia con la que llevamos a cabo una obligación, qué tan activos seremos al actuar.
En los grandes ejemplos de mujeres y hombres que han logrado éxito o son referencia en lo que hacen, más que lo que van a percibir o ganar en dinero, es saberse qué tan aptos y eficientes pueden ser. Porque al fin y al cabo, más que el resultado, se va a notar qué esfuerzo se le dio a la tarea encomendada.
Porque hay quienes pueden conseguir una meta pero si a la misma no se le imprime operatividad, quedará siempre en el fondo que pudo lograr aún más si le agregaba mucho mayor esfuerzo.
Nosotros lo asemejamos mucho ser eficiente, a ponerle pasión a lo que llevas a cabo. Por esto, cuando vemos un empleado o compañero de trabajo o alguien que contratamos, vale más la forma en que esta persona logra hacer su trabajo porque le aplaudimos su diligencia y su dedicación.
Hay que tener respeto por aquellas personas que no necesitas llamarle en atención para recordarle lo que tienen que hacer y cómo hacerlo, porque ya tiene en sí mismos, la eficiencia y ser eficientes en todo aquello que llevan a cabo, no solo en su rol laboral.
Hasta para cuando tenemos que serlo frente a las adversidades y dificultades, el Todopoderoso espera de cada uno de nosotros le demos mayor valor a lo que creemos de su presencia y El espera de nosotros mayor valía en lo que hacemos y cómo lo hacemos.
La eficiencia, será siempre reconocida, independientemente del resultado que al final podamos tener, porque siempre llevará luz donde quiera que la presentes.